En esta ocasión vamos a ver una planta colgante: la surfinia, petunia hibrida o petunia colgante. Las surfinias son una variedad de petunias que son mucho más vigorosas y sus floraciones duran más que las de las petunias.

En el caso de las petunias, no suelen durar durante toda la época de primavera-verano, pero en el caso de las surfinias, pueden durar hasta principios de otoño o principios de las primeras heladas.

 

Cuidados de la surfinia

Son plantas muy usadas en jardinería por su enorme floración y su crecimiento colgante o tapizante, por ello sus necesidades de nutrientes y agua son importantes; la tierra ha de ser fértil, suelta y bien drenada y es conveniente hacer abonados cada 8 o 10 días con contenidos altos en fósforo y potasio.

El riego ha de ser abundante pero entre riego y riego hay que dejar secar ligeramente la tierra para evitar problemas de hongos del cuello de la raíz; el agua no ha de tener cal.

Hay que eliminar las hojas y las flores marchitas y aprovechar para dar pinzados con frecuencia para favorecer la ramificación y aumentar la floración.

Después de una gran floración, es conveniente darle una poda fuerte para provocar nuevamente una floración abundante.

Al final del año se le puede dar una poda muy fuerte, dejando la planta casi a ras de tierra y si el invierno no es muy fuerte, rebrota en Primavera.

Se las ha de colocar a pleno sol.

 

Plagas y enfermedades

Además de los hongos del cuello puede aparecer botritis en hojas o flores marchitas no eliminadas. Los pulgones, araña roja, la cochinilla y la mosca blanca, son insectos que atacan con frecuencia a esa planta.

Hay que tener cuidado con las orugas, las babosas y los caracoles que pueden acabar con una planta en pocas horas.

 

Cómo esquejar su ejemplar

El primer paso que debe darse para conseguir multiplicar todas las surfinias consiste en retirar sus flores marchitas, para que la planta esté más vigorosa y los esquejes tengan más fuerza y posibilidades de arraigar.

A la hora de seleccionar las partes de la planta que vaya a esquejar, elija los tallos laterales más desarrollados, siempre y cuando estén sanos y mantengan su flexibilidad.

Los esquejes deberán tener unos 10 centímetros de largo y no presentar marcas de ataques de plagas.

Elimine las hojas inferiores del tallo seleccionado, de tal manera que tan sólo queden unas cuantas hojas en su extremo superior.

Empape el extremo inferior del tallo en una sustancia enraizante y plántelo en un sustrato rico en nutrientes.

Agujeree un poco la tierra con un lápiz o similar para que el agua pueda empaparla y afiáncela para que los esquejes se mantengan firmes.

Riegue su futura planta y tápela con un plástico que no entre en contacto con el esqueje durante unos días para ayudarle a mantener la humedad.

 

¿Surfinia o Petunia?

Las Petunias y las Surfinias son dos plantas que se pueden confundir perfectamente. Ambas plantas son iguales, puesto que una es híbrida de la otra.

Las dos se caracterizan por tener una abundante floración, desde primavera hasta otoño. Además, sus hojas son verdes, pequeñas, algo pegajosas y con pelos.

Podemos encontrar flores de todos los colores, desde un rojo intenso a un blanco luminoso o una combinación de ambos colores. Estas flores tienen una forma acampanada y desprenden un rico aroma.

Es lo más vistoso de la planta, pues llega a tener tantas flores que tapan prácticamente a las hojas. Debido a esto, se deben de ir eliminando las flores marchitas para que surjan otras nuevas.

La Petunia y la Surfinia sin embargo, no son exactamente iguales, aunque a simple vista sí. La Surfinia es un híbrido de la Petunia. Por tanto, las Surfinias tienen los estambres estériles y no dan semillas pero se pueden multiplicar a través de esquejes.

Sin embargo, la Petunia si da semillas, siendo esta su mejor forma reproducción.

Además, la Surfinia suele dar muchas más flores que las Petunias, aunque suelen ser algo más pequeñas.

Incluso las Surfinias son conocidas como “Petunias colgantes” pues suelen caer por encima de la maceta donde están plantadas colgando. Las Petunias, son algo más rastreras, pero también pueden llegar a colgar.

Ambas plantas aguantan el sol directamente pero requieren mucho riego, aunque hay que tener en cuenta que no se deben mojar las flores, pues se estropean.

El frío también lo aguantan bien y pueden durar de un año para otro, aunque no es conveniente, pues las plantas viejas florecen peor. Es mejor recoger las semillas de las Petunias y sembrarlas el año siguiente.