El anturio es una de las plantas de interior más populares. Es fácil de cuidar y muy atractiva.
El anturio dota sin duda de personalidad al hogar: en blanco transmite serenidad mientras que las variedades más coloridas transmiten una sensación dinámica y vivaz.
Aunque la mayoría de la gente piensa que lo colorido de la planta en la flor, en realidad es una bráctea. Las flores del anturio son muy pequeñitas y pueden encontrarse en la espiga.
Origen
El anturio procede de los bosques tropicales de Colombia, Guatemala y en la región amazónica de Brasil. La planta crece allí como un epifito, lo que significa que crece sobre los árboles sin que la mayoría de sus raíces extraigan nutrientes de los árboles.
La planta obtiene suficiente luz en esos espacios pero no le da directamente la luz del sol, y siempre se encuentra en un lugar cálido con altos niveles de humedad.
Elige la tuya
El número de variedades de anturio se ha expandido sustancialmente recientemente. Existen variedades grandes con formas holgadas y brácteas como orejas de elefante y también variedades compactas con “flores” pequeñas.
Aunque pueden encontrarse en múltiples colores como blanco, las series “Love” y “Champions” son muy particulares y hay variedades que garantizan 300 días de floración.
Cuidados básicos
• Al anturio le gustan los espacios luminosos, aunque pero no lo exponga al sol directo.
• Es necesario mantener la temperatura del espacio que se encuentra entre 18 y 22 ºC.
• No debemos dejar que el sustrato se seque completamente, aunque tampoco debemos dejar que las raíces permanezcan inundadas.
• Pulverizarla con agua para reproducir la humedad de los bosques tropicales.
• Las flores marchitas se pueden retirar.
• Hay que abonarla una vez cada tres semanas, lo que le ayuda a mantener sus flores relucientes durante largo tiempo.